Como os contamos en el artículo anterior introductorio del Salón del Automóvil de Madrid, nos ha parecido interesante ir punto por punto por lo más destacado de éste, todo lo que de paró pabellón por pabellón. Este certamen ha sido el más limitado y solo contó con tres de estos pabellones, aun así intentaremos sacarle el máximo jugo a toda la información que pudimos reunir.
La primera zona estaba reservada para Mercedes-Benz y Smart,
una zona amplia y bien ordenada donde la firma alemana exponía ante su público
toda su gama incluyendo las joyas de la corona, nos referimos sin lugar a dudas
al que iluminaba este espacio, el SLS AMG Roadster que resplandecía con ese
color rojo intenso y que robo el mayor número de miradas. Junto a éste un
impresionante Concept Style Coupé que giraba 360 grados para que no nos perdiéramos
ni un detalle de esta maravilla, diseño que ha generado más de un modelo de la
marca y de los cuales destacamos el esperado Clase A.
Este box también tenía un espacio reservado para los más
económicos, el Mercedes Clase A eléctrico que se nos presentaba enchufado a lo
que parece ser su batería eléctrica, una idea de eficiencia que también
perseguía el Clase E Bluetec Hybrid, disponible en septiembre y que con su
tecnología híbrida consigue una media de 4.2 litros cada 100 km.
Por último, la presencia del SL también llamó la atención de
los asistentes incluyendo al Clase C coupé, que desde su llegada al mercado sigue atrayendo
seguidores.
La presencia de Smart era casi de relleno, Mercedes ocupaba
toda su zona dejando para su marca filial un rincón dónde podíamos
percatarnos de las nuevas incorporaciones que ha sufrido el For Two.
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