Si retrocedemos cuatro años en el tiempo, nos encontramos con un modelo que perseguía sustituir al Kia Cerato, un coche de fama mundial. Éste, había puesto el listón alto y debían encontrar un buen sustito de tal vehículo. En este contexto apareció el Ceed dispuesto a dejar el pabellón bien alto. A día de hoy, y con las cifras en la mano, ha dado la talla plantando cara a marcas tan asentadas como Ford y su Focus o Renault y su mimado Mégane, todo ello partiendo de la fama que tienen los fabricantes de Corea y su particular manera de hacer coches bastantes básicos en cuanto a prestaciones se refiere.
Dejando el pasado atrás, este asiático vuelve con ganas de más y se presenta con nueva imagen. Principalmente gana en atractivo, un frontal mucho más redondeado con unos faros agresivos siguiendo la línea de su hermano pequeño el Rio. Gana en anchura y en longitud, aunque se mantiene en una habitabilidad muy parecida a su predecesor. Montados en él observamos un aumento de tecnología y obviamente de prestaciones, algunas de ellas como la cámara trasera, navegador, botón de arranque y, lo más importante, un aumento de calidad en los materiales. Esto dependerá del nivel de equipamiento escogido entre “concept”, “drive” y “emotion”. Es importante añadir que ha sido creado integramente en Europa, por tanto lleva algo del gen europeo.
La gama de motores que podemos elegir son un 1.4 de 90 CV y un 1.6 de 128 CV diesel. En combustible de gasolina nos ofrecen el 1.4 de 105 CV y el 1.6 de 135 CV.
En cuanto a su precio, desde 13.715€. La calidad-precio es abrumadora en el nuevo Kia Ceed.
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